El 30,5% de los docentes de primaria en Argentina trabajan en dos o más escuelas. Esa proporción es muy superior al promedio de los países de América Latina (11,4%), y solo es superada por Brasil (38,6%). Argentina también es el país de la región con el mayor porcentaje de educadores que tienen otro trabajo remunerado por fuera de la escuela: el 14,4% de los docentes argentinos declaran tener otra actividad remunerada, mientras que el promedio regional es 8,4%.

Los datos surgen del informe “Características y condiciones de trabajo de las y los docentes de primaria”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Mariano Alu (Universidad de San Andrés), Samanta Bonelli y Martín Nistal (Observatorio de Argentinos por la Educación). El documento se basa en la información provista por los cuestionarios complementarios del Cuarto Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE), llevado a cabo por UNESCO en 2019 en 16 países de América Latina en el nivel primario.

En Argentina 9 de cada 10 docentes de primaria son mujeres (94,6%): es el país de la región con mayor tasa de feminización de la profesión. A nivel regional el porcentaje promedio de mujeres en la docencia es 74,2%. La edad promedio de los docentes del nivel primario de nuestro país es 43,9 años, muy cerca del promedio regional (43,1 años). Los docentes locales tienen un promedio de 13,8 años de experiencia, en línea con la antigüedad promedio en la región (15,2 años).

La mayoría de los docentes de primaria en nuestro país están contratados por un turno escolar, equivalente a media jornada. Este factor parece explicar la mayor proporción de docentes argentinos que trabajan en más de una escuela en comparación con sus pares de la región. El 41,8% de los docentes argentinos tiene por contrato el equivalente a un turno por semana (22,5 horas), mientras que el 34,9% tiene entre 22,5 y 40 horas. Uno de cada cuatro (23,3%) respondió que el contrato supera las 40 horas por semana.

En 2008, la Resolución Nº 74 del Consejo Federal de Educación estableció que las carreras de formación docente debían durar un mínimo de 4 años. Por eso, en Argentina los docentes más jóvenes han realizado una formación más extensa que sus colegas de mayor edad. Los docentes que tienen entre 22 y 30 años cursaron una carrera de formación de 4 años, mientras que quienes tienen entre 51 y 60 años realizaron un año menos de formación inicial. A nivel regional, el promedio de duración de la carrera es de 3,9 años.

El 67% de las y los docentes de Argentina son titulares de su cargo. La cifra está por debajo del promedio regional (71,5%), es decir que en nuestro país hay una mayor proporción de docentes suplentes que en el resto de América Latina. El porcentaje de docentes titulares aumenta a medida que crece la antigüedad en la profesión: entre quienes tienen 10 años de experiencia, el 84% es titular de su cargo.