En el sector privado, 9 de cada 10 estudiantes cuentan con wifi o banda ancha en el hogar, mientras que en el sector estatal son solo 6 de cada 10. También es mayor la proporción de alumnos de escuelas privadas que tienen notebook o algún otro dispositivo propio para hacer las tareas escolares. Además, las escuelas privadas utilizan en mayor medida plataformas de videoconferencia para clases sincrónicas.

Los alumnos de escuelas privadas tienen un mayor acceso a dispositivos para poder sostener la continuidad pedagógica de manera remota y, a la vez, disponen de más y mejores opciones para conectarse. Hay una brecha tecnológica entre ambos sectores de gestión, seguramente asociada a las brechas socioeconómicas entre los hogares.Los datos surgen del informe “Análisis comparado entre educación pública y educación privada en contexto de COVID-19 (primera parte)”, del Observatorio Argentinos por la Educación y con autoría de Mariano NarodowskiVíctor Volman y Federico Braga. El documento presenta los resultados de una encuesta nacional que relevó las prácticas escolares de continuidad pedagógica en el contexto de la pandemia de COVID-19 en las escuelas primarias de gestión privada.

La encuesta fue respondida por familias en base a una muestra representativa a nivel nacional de 253 escuelas primarias comunes de gestión privada en ámbitos urbanos. Los datos fueron recogidos en línea, es decir que los resultados son representativos de hogares con conexión a internet. El informe es el quinto de la serie La educación argentina durante la pandemia de COVID-19. Un estudio sobre la situación de familias y alumnos durante el aislamiento, y compara los datos del sector de gestión privada con los del sector estatal.