Contar con un sistema de información nominal es fundamental para poder hacer un seguimiento de las trayectorias educativas desde los distintos niveles de gestión y para tomar decisiones basadas en evidencia, explica el informe “Argentina: Nominalización de datos educativos”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, elaborado por Samanta Bonelli. El documento releva avances en la nominalización de datos educativos en las jurisdicciones y desafíos pendientes en la consolidación de un sistema de información nominal con cobertura nacional.
El informe del Observatorio de Argentinos por la Educación se basa en un relevamiento en línea del que participaron 17 de las 24 jurisdicciones (Buenos Aires, CABA, Chaco, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Luis, Santa Fe y Tierra del Fuego). Todas ellas cuentan con altos niveles de cobertura de datos nominales de sus estudiantes.
El nivel primario es el que presenta la proporción más alta de matrícula nominalizada (99% de los alumnos en las escuelas estatales y 96% las privadas), mientras que las cifras más bajas están en el nivel superior no universitario (76% de cobertura en las instituciones estatales y 37% en las privadas). Esos datos se generan en sistemas de información propios (en 15 de las 17 jurisdicciones), en el SInIDE Gestión Escolar provisto por Nación (en 2 provincias) o de ambas formas (en 3 provincias). No respondieron la encuesta Catamarca, Chubut, La Rioja, San Juan, Santa Cruz, Santiago del Estero y Tucumán.
A su vez, desde el gobierno nacional se desarrolló una plataforma web denominada “Base Nacional Homologada” que recibe e integra la información del SInIDE y de los sistemas nominales jurisdiccionales. El Ministerio reporta que en esa base cuenta con datos del 84% de la matrícula de los niveles inicial, primario y secundario de las 24 jurisdicciones del país (en 2021, la cifra era 74%). Una estrategia por parte de la gestión del Ministerio de Educación nacional anterior fue desarrollar un sistema de gestión institucional (SInIDE Gestión Escolar) donde al momento 15 mil escuelas en 10 provincias cargan diariamente la información nominal de sus estudiantes (como asistencia o calificaciones).
Más allá de los avances en los últimos años, el informe subraya que aún no se alcanzó la cobertura del 100% de la matrícula nominalizada a nivel nacional. También advierte sobre ciertas limitaciones de la Base Nacional Homologada: al alimentarse de información anual y no continua, los datos no están disponibles de manera dinámica, lo que dificulta el acompañamiento oportuno de las trayectorias educativas.
El estudio también sistematiza las reflexiones de un conjunto de referentes de estadística y evaluación de 9 provincias sobre los desafíos en el uso de la información educativa. Para aprovechar mejor los datos, los referentes señalan la necesidad de instalar desde el nivel político la importancia de la información y de su uso para la toma de decisiones, actualizar la normativa, fortalecer y descentralizar la carga de datos, mejorar las capacidades de uso y contar con información oportuna, entre otras condiciones prioritarias.