Los ministros de Educación provinciales tuvieron un promedio de 3,3 años de duración en el cargo en los últimos 20 años. La cifra es superior al promedio de 2,8 años de duración de los ministros de Educación nacionales entre 2003 y 2023, pero inferior a los 4 años de mandato previstos para los gobernadores y el jefe de Gobierno de CABA. Desde 2003 han pasado en total 167 autoridades educativas en las 24 jurisdicciones del país.
Los datos surgen del informe “Ministros provinciales: ¿Cuánto tiempo están al frente de las carteras educativas?”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, realizado por Martín Nistal y Nahuel Palomo con la colaboración de Marisa Díaz (exministra de Educación de La Rioja y exsecretaria del Consejo Federal de Educación). El informe analiza la estabilidad de las autoridades educativas de las provincias entre el 10 de diciembre de 2003 y la actualidad, a partir de documentación oficial de las 24 jurisdicciones.
Las provincias con mayor estabilidad de ministros de Educación han sido Córdoba y Tucumán: cada una tuvo 3 ministros en 20 años, con un promedio de duración en el cargo de 6,7 años. Luego aparecen Formosa y Misiones, con 4 ministros cada una y una duración promedio de 5 años. La que ha tenido menor estabilidad es Chubut, con 13 ministros: una duración promedio de 1,5 años. La siguen San Luis, Chaco y Tierra del Fuego, con 10 ministros cada una desde 2003.
La estabilidad de las autoridades en puestos de decisión suele ser necesaria para la sostenibilidad de las políticas públicas. “La duración en el cargo de los ministros conforma una experiencia indispensable para desarrollar una gobernabilidad efectiva y concretar con éxito la implementación de políticas”, explica el informe. Aunque la estabilidad no garantiza una gestión exitosa, un mandato breve dificulta la implementación de reformas y puede considerarse un indicador de la seriedad con la que el Poder Ejecutivo trata los temas de educación.
El 56,9% de los ministros provinciales han sido varones y el 43,1%, mujeres. La cifra contrasta con el alto nivel de feminización de la profesión docente: el 94,6% de docentes de escuela primaria son mujeres, así como el 66,6% de directores de escuela secundaria. En otras palabras, la participación de las mujeres en cargos públicos de decisión es mucho menor que la que tienen en el sistema educativo.
La provincia con mayor proporción de mujeres ministras de Educación ha sido Santa Fe (83,3%), seguida de Santa Cruz, Tucumán, Santiago del Estero y San Juan (67% cada una). La provincia con menor proporción de ministras desde 2003 fue La Rioja (20%), seguida de Formosa, Misiones y Neuquén (25%).
En estos 20 años hubo, por lo menos, un cambio de ministro por año. En general, los años con mayor rotación coincidieron con los de elecciones de presidente y gobernadores: 2007 (23 cambios de ministros provinciales), 2015 (18 cambios), 2011 y 2019 (16 cada uno). Los años con menos recambios fueron 2010, 2020 y 2023 (hasta julio), con una sola modificación.